Salud, Su Majestad!!!
Indy Point brilló en el “Jockey Club”, con singular
doblete de G1 para Parade Marshal como abuelo materno
Después del GP Polla de Potrillos-G1, el autor de estas líneas señaló a Indy Point como cabeza de un hipotético “Free Handicap” generacional, y expresó que, tal vez, Sol Planet había encontrado entonces el primer pase de la Cuádruple Corona.
De nuevo vacante, porque el alazán cuidado en La Plata por el ex piloto de Off the Record se llevó en notable forma el Gran Premio Jockey Club-G1 (2000 mts., $ 680.000), y así ratificó aquella embrionaria impresión periodística de distinguir en la derrota al líder de la camada… en el sonado cotejo desnaturalizado por las absurdas circunstancias preliminares inherentes a los preparativos de su suelta.
Muy confiado y listo a enmendar los errores señalados por una hidalga autocrítica, Gonzalo Hahn condujo 2º expectante al favorito de $ 4.30, controlando a voluntad el cómodo ritmo del vanguardista Rival Dan (24:00, 47.73, 1:12.00), y mientras los demás trataban de desembocar apertrechados en el derecho, con Big Cazanova tercereando a piacere y Sol Planet abrigado a la empalizada, se observaba que el defensor de la ecurie “Gus-May-Fer” se agarraba a la hierba sin extrañar para nada en su debut absoluto sobre la superficie vegetal.
Ya en la recta, Indy Point (510 kilates) quebró sin extremarse a Rival Dan, y a falta de cuatro cuadras (1:34.69) comenzó a tutearse con la gloria. Para abrazarla definitivamente en los 300 decisivos, cuando rechazó con holgura los embates del regular Big Cazanova –perdedor de súper lujo...- y Di Giorgio, doblegándolos por 2 cuerpos y ¾ en el excelente guarismo de 1:58.25 para la gramilla normal.
A 4 largos de la trifecta, el G1 Johnny Guitar no gravitó, frenando por ½ pescuezo la tibia escalada del G2 Corsalone; a ½ del representante de “La Frontera” cruzó Sol Planet, con tropiezos por los “cuatro” al buscar por dentro, pero sin energías reales en el motor.
Felipe Lovisi crió al descendiente del destacado Indygo Shiner (USA) y la prolífica Red Point, por Parade Marshal (USA) –completó el notable doblete iniciado por su nieto Maipo Royale-, cuya campaña no admite objeciones: 2º en el Goenaga-G2, 3º en el Propietarios de Caballos de Carrera-G3, 1º en GP Estrellas Juvenile-G1, 1º en el Miguel Cané-G2, 2º en la “Polla”, y ahora medalla dorada en el test clásico más añejo de nuestro historial, ése donde Indy Point va forjando un lugar trascendente a través de un estelar palmarés de cuatro lauros en una decena de performances, con recompensas por $ 1.181.950.
Desde Have a Champ (1998) que el turf platense no festejaba en los diez furlongs de octubre. Raúl Ramallo tiene un filón entre manos. Y el remate de su pensionista invalida cualquier discusión de café, aquietando las aguas de una generación agitada por las sucesivas intemperies, pues se ha apoderado sin dudas del bastón de mando. Y si bien Big Cazanova merece revancha por una cuestión de nobleza, la contundencia de Indy Point obliga a rendirle pleitesía.
Salud, Su Majestad!!!
INDY POINT oculta a su escolta Big Cazanova en un cierre desahogado
Revista Todo a Ganador
Pablo F. Gallo
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